jueves, 14 de julio de 2016

¿Te tocó restructura laboral y estás sin empleo? No es el fin del mundo, aquí unas recomendaciones.



Últimamente he visto a muchos amigos pasando por esta etapa de transición laboral, yo estuve en dicho proceso un par de veces el año pasado, no es motivo de pena, a veces resulta en un ran crecimiento y otras veces resulta en un gran reto para crecer y recuperar el puesto que solíamos tener.


Parece que es la nueva estrategia en las empresas (sobre todo del sector financiero): deshacerse de empleados que resultan pasivos laborales caros. Esto debido a políticas de reducción de costos que las empresas están enfrentando. Si eres “caro” estás en la mira, y si eres directivo y con muchos años de antigüedad, eres el “target”; y esto independientemente de si has o no dado resultados, si eres o no buen líder, si tienes o no buen equipo de trabajo, o si haces o no sinergias con otras áreas. Cualquiera puedes ser el siguiente en la lista.
Las empresas tienen que cumplir con un número objetivo cuando quieren reducir costos, y como consecuencia es probable que se queden con empleados que ganen menos, y que aunque en ocasiones no  cuentan con la experiencia suficiente, puedan sacar el trabajo adelante.
Entonces se da lo inesperado. Tú estás en la lista, y de pronto te ves desempleado, con mucha experiencia y un buen currículum, con más de 45 años y enfrentándote en muchas ocasiones por primera vez al reto de buscar empleo. En mi caso, después de 19 años de una carrera profesional impecable, amanecí un día sin empleo, y con hijos adolescentes en casa, una hipoteca y gastos fijos elevados que hay que seguir cubriendo.
Cualquiera diría que después de 19 años la liquidación da tranquilidad durante un tiempo sin necesidad de prescindir de nada esencial y sin la urgencia de emplearte en lo primero que se te aparezca. Esto es correcto, pero no puedes actuar pasivamente, tienes que comenzar cuanto antes la búsqueda de empleo que, por estadística, en puestos directivos toma en promedio 8 meses.
Por supuesto pasas un proceso de duelo como cualquier relación de tanto tiempo. Se vale deprimirse, se vale llorar y enojarse, o se vale tomar terapia si así lo crees necesario. Pero tienes dos opciones, seguir empeñado en lamentarte por lo que te pasa, o tratar de cerrar el capítulo lo antes posible y seguir adelante. Obvio lo segundo es lo recomendable.
Tienes que hacerte a la idea de que ahora tienes un nuevo empleo. Esto es, tu trabajo es buscar trabajo. ¡Y estamos hablando de un trabajo que requiere un mínimo de 6 horas diarias! No creas que dedicándole un par de horas es suficiente, si realmente quieres reincorporarte a la vida laboral lo antes posible, tienes que dedicarle el tiempo que dedicas a cualquier proyecto en un trabajo de oficina.
Ahora, después de 5 meses y medio de búsqueda activa, 53 entrevistas de trabajo (7 telefónicas y el resto presenciales), y 33 reuniones entre desayunos, comidas y cafés, finalmente me reincorporo a la fuerza laboral. Ha quedado atrás esta experiencia como eso, una experiencia de vida en un periodo de transición.
¿Qué me deja este periodo? Muchas enseñanzas y experiencias, y recomendaciones básicas para los que están enfrentando una situación similar. A continuación las enuncio:
  • No estás desempleado, estás en periodo de transición laboral.
Parece sencillo el cambio de conversación, pero es básico para tu actitud y cambio de mentalidad. El hecho de convencerte a ti mismo que esta etapa es sólo una transición al siguiente paso profesional, hará que te sientas activo y dejes los malos pensamientos. Velo como una época de oportunidades, de nuevos retos que seguirán complementando tu carrera laboral, no como lo peor que te pudo pasar. No te lamentes de estar en transición, porque no podrás entonces dar la vuelta a la página y continuar adelante.
  • Involucra a tu familia y amistades en tu proceso.
No ocultes tu situación a nadie. Tu familia está para apoyarte en buenos y malos momentos, así como tus amistades. Coméntalo con tu cónyuge e hijos y déjales ver que tu situación es temporal. Si te ven tranquilo, le resta estrés a la situación. Deja en claro a tu círculo familiar o social que por el momento no tienes empleo, porque nunca sabes dónde puede presentarse una oportunidad, o si tus familiares o amigos conocen a alguien que conoce a alguien que está buscando cubrir una vacante.
Te sorprenderá también la cantidad de gente dispuesta a ayudarte y a enviar tu currículum a conocidos. Eso siempre es gratificante.
  • Reactiva tu red de contactos cuanto antes.
Es muy común que pierdas contacto con gente con la que has coincidido en la vida, ya sea escuela o trabajo. Es momento de enviar correos o hacer llamadas telefónicas y reactivar tu red de contactos. Según estadísticas, el 80% de la reinserción a la fuerza laboral corresponde a recomendaciones de conocidos, y sólo el 20% restante proviene de contactos directos por buscadores de empleo o Head Hunters.
Por tanto, reactivando tu red de contactos aumentas dramáticamente la posibilidad de conseguir entrevistas y por tanto de reubicarte en el mercado laboral.
Incluso te sorprendería que aquellas personas de las que esperas gran ayuda finalmente no son tan efectivas como aquellas que voluntariamente se proponen ayudarte, que en ocasiones no son tus amistades más cercanas.
Organiza desayunos, comidas o cafés con aquellas personas que quieras volver a ver o aquellas amistades que sabes están bien conectadas en el medio. Siempre es bueno que mantengas vivos estos contactos y no los dejes perder aún y cuando te recontrates.
  • Ten actualizado tu perfil de Linkedin de manera profesional.
El perfil de Linkedin resulta en estos tiempos esencial tenerlo actualizado. Si no tienes empleo, no tengas miedo de actualizar tu perfil con la última fecha en la que trabajaste. En el título que te define en tu perfil, trata de poner tus áreas de especialización como si estuvieras leyendo la introducción a tu CV; de esta forma tu perfil aparecerá cuando la gente de atracción de talento busque candidatos.
Te recomiendo que la foto de perfil que utilices sea profesional, de preferencia con fondo blanco, y que vaya de acuerdo a tu “expertise”. Evita que la foto sea de alguna reunión social, o que sea una foto familiar. Recuerda que es un perfil que te ayudará a conseguir tu siguiente reto profesional.
Una red de Linkedin para ser efectiva tiene que tener más de 500 contactos de primera línea, por lo que si tienes menos comienza a invitar gente conocida o profesionales que realizan actividades afines a tu “expertise”. Te sorprenderá lo rápido que puede crecer tu red de contactos.
  • Si la empresa que te liquidó te pagó servicios de “outplacement”, no dudes en tomarlos.
Las empresas de “outplacement” aumentan de forma relevante la posibilidad de que consigas empleo. En estas empresas te dan cursos y te ayudan a actualizar tu CV de manera profesional (como máximo se recomienda de dos hojas). Te dan tips y te ayudan a contactarte con Head Hunters o personal de atracción de talento de empresas en las que te gustaría trabajar. No dudes un segundo en sacar todo el jugo a este servicio que ya fue pagado por tu anterior empleador.
En caso que no te hayan pagado “outplacement”, puedes buscar tú mismo pagártelo. Vale la pena cotices algún servicio personalizado, hará una gran diferencia en tu proceso.
  • Levántate temprano y realiza actividades como lo hacías cotidianamente.
Como ya lo mencioné anteriormente, tu nuevo empleo es buscar trabajo. El levantarte temprano y realizar actividades que realizabas cuando estabas empleado hará que anímicamente no sientas que no estás trabajando. Haz ejercicio o lleva a tus hijos a la escuela como solías hacerlo, y comienza a trabajar en conseguir tu siguiente reto profesional.
Te recomiendo si te es posible, salir de casa para conseguirlo. Si puedes pídele a un amigo te de “asilo” en su empresa prestándote un lugar mientras estás en tu proceso. O también puedes usar los centros de trabajo que las empresas de “outplacement” tienen designados para gente en época de transición (son lugares donde puedes usar PC y teléfono, y puedes usarlo como “oficina temporal”). Esto te ayudará a sentir que “vas a la oficina” y tu ánimo no decaerá, ya que sentirás que realmente estás trabajando.
  • Vístete diariamente como si fueras a trabajar.
Cada mañana ponte traje aunque la corbata la lleves aparte (si eres hombre) o usa ropa de oficina (si eres mujer). Vístete como el puesto al que aspiras, ya que nunca sabes si a mitad del día te llamen de improviso a una entrevista, y qué mejor estar listo cuando esto suceda.
Me pasó  y le ha pasado a varios. Como estás haciendo llamadas, aplicando en páginas de empleos y mandando correos, es probable que te citen ese mismo día a entrevista, y lo que menos quieres es decir que no puedes sólo porque no traes la vestimenta adecuada.
  • Ensaya las respuestas que darás en tus entrevistas.
La pregunta obligada es: ¿Porqué fuiste parte de la reestructura en tu anterior empleo? No ocultes nada y responde con naturalidad. Ejemplo: “hubo recorte de costos y la reducción en personal se dio en el nivel “top management”, por lo que se redujo la estructura y mi puesto desapareció”.
Te sorprenderá la naturalidad con la que toman la respuesta, ya que es muy común en estos días que se den esos procesos, y ya no preguntarán más. Varios entrevistadores de niveles directivos me comentaron que era un proceso que todos tendremos que pasar en algún momento.
Puntualiza tus logros en cada puesto ocupado en tu carrera profesional. Cuando te pregunten las funciones que tenías, busca siempre la oportunidad de mencionar los resultados obtenidos y cómo estos ayudaron en la consecución de algún objetivo.
Si te es posible grábate y obsérvate, o pide a un amigo que te realice una entrevista simulada. El lenguaje no verbal tiene que coincidir con el verbal, y qué mejor juez que tú mismo para analizar si eres congruente con lo que dices y lo que proyectas con tu cuerpo.
  • Aplica a empleos en Linkedin y en los principales buscadores de empleos.
Buscadores de empleo en líneas como Linkedin, OCC, OCC ejecutivo, Indeed, Glassdoor, Bumeran, Lucas5, entre otras, constantemente suben vacantes y por tanto hay que dar de alta el CV en cada una de ellas.
Dar de alta tu perfil en las páginas mencionadas, así como en las páginas de Head Hunters y de las empresas en las que te interesa trabajar es tardado, tedioso y cansado. Prepárate para largas sesiones en línea para dejar todo preparado y te comiencen a llamar.
No esperes que te marquen de  los empleos a los que apliques. Por la cantidad de aplicantes a cada vacante es imposible que la persona encargada del puesto contacte a cada uno de estos. Sin embargo, es probable que tu CV haga “match” con lo que buscan y te lleguen a marcar. En algunas ocasiones en las vacantes subidas a la red incluyen los datos de la persona a la que puedes contactar. Si este es el caso puedes enviarle correo personalizado o incluso adecuar tu CV a los requerimientos específicos del puesto.
  • Cambia algo en tus perfiles de los buscadores de empleo en línea una vez al mes.
Por lo menos una vez al mes, métete a tu perfil en los buscadores de empleo y cámbiale algo. No quiere decir que agregues un puesto o cambies la redacción mes a mes. Puedes agregar un espacio, poner un punto y seguido o agregar una palabra. Esto es porque cuando los empleadores buscan candidatos, las páginas en las que buscan mostrarán primero los CVs actualizados recientemente, por lo que siguiendo este sencillo consejo, tu CV será de los primeros que aparezcan en sus búsquedas.
  • Intenta contactar a los principales Head Hunters de tu especialidad.
El papel que juegan los Head Hunters sigue siendo relevante, y es importante te tengan en mente para oportunidades que puedan llegar a tener. Sin embargo es común que no te tomen las llamadas o no contesten tus correos. Considera que diariamente reciben decenas de correos con CVs e información de gente que busca colocarse en el mercado, por lo que no tienen tiempo de contestar todo lo que reciben.
Trata de invitarlos a tu red de Linkedin o envíales mensajes inbox presentándote y enviando tu CV. Si aún así no logras que te respondan, trata de que alguien te recomiende con ellos, muchas veces al saber que vienes recomendado te entrevistan más rápido.
Verás que tarde o temprano comienzan a llamarte y a citarte a entrevistas, pero recuerda que si no tienen vacante es poco probable que te den entrevista personalizada. Lo relevante es que te tengan presente para vacantes futuras.
  • Date el lujo de decir “no” a ofertas que no satisfagan tus expectativas.
No es agradable estar en periodo de transición y decir que no a ofertas laborales. Muchos profesionales toman las oportunidades “por vía de mientras”, por la idea de que es más fácil conseguir trabajo con empleo. Sin embargo, esto es un error, si la oferta que tienes no te llena y no satisface tus necesidades tanto económicas como profesionales, es válido decir que no y continuar con la búsqueda.
Obviamente lo anterior depende del paquete de liquidación que te dio la empresa donde trabajabas, puesto que eso va ligado al tiempo que puedes soportar sin trabajar. En mi caso, dije no a dos ofertas laborales antes de aceptar la tercera. La primera vez que dije no, me deprimí y me acechaba la pregunta de si había o no hecho lo correcto. Sin embargo, ahora puedo afirmar que tomé la decisión acertada.
Espero estas recomendaciones te sirvan si estás en transición laboral o compártelas con aquellas personas que conoces que están pasando por esta etapa.
Mucha suerte a todos en lo que venga, y recuerda que nadie se salva de pasar por este periodo, es completamente normal; en medida de tu esfuerzo empezarás a ver opciones atractivas, toma el empleo que te genere pasión, como dice la frase:
"HAZLO CON PASIÓN O CAMBIA DE PROFESIÓN"
¡Éxito!

viernes, 8 de julio de 2016

Autosabotaje: 4 COMPORTAMIENTOS QUE NOS DETIENEN a los Mexicanos (y al resto de los Latinos)

Autosabotaje:

 4 comportamientos que nos detienen

“Autosabotaje: 4 COMPORTAMIENTOS QUE NOS DETIENEN a los Mexicanos (y al resto de los Latinos), y que NOS IMPIDEN EL EXITO.”autosabotaje

Muchas personas me preguntan continuamente en las conferencias que dicto por internet: “¿Cómo evito el autosabotaje?”. Hoy quiero compartirte cuatro comportamientos que considero que nos están deteniendo más de lo que pensamos y que por lo mismo es muy valioso ponerles atención.

Graba esta frase en tu mente…

SIEMPRE van a existir razones para no hacer las cosas.
Anthony Robbins dice que “lo que está mal siempre está disponible, pero también lo que está bien”. Se refiere a que siempre van a existir razones para sentirse bien y razones para sentirse mal, razones para seguir y razones para detenerte, razones para hacer las cosas y razones para no hacerlas. ¿Cuáles ganan? Aquellas en las que te enfoques.

Pregúntate ¿qué te detiene para lograr tus sueños más ambiciosos?

La respuesta siempre es una razón que parece válida. Siempre va a existir alguna. Y tus acciones y tus resultados dependen de lo que tú decidas.

Tenemos grabados en la mente algunos conceptos y comportamientos que no nos dejan avanzar, porque nos dan resultados a corto plazo y fastidian nuestros resultados a largo plazo. En un taller que impartí en vivo recientemente le mencioné a los asistentes las cuatro cosas que yo pienso que detienen a los mexicanos (y probablemente a todos los demás latinos también porque creo que es cuestión de nuestra cultura).

4 cosas que detienen a los mexicanos (y a los latinos también) y que considero como autosabotaje:

1. Esquezofrenia

Si, leíste bien. La palabra no es mía sino que la escuché de un funcionario de la Secretaría de Economía en una conferencia de emprendedores.
“Es que no tengo tiempo”
“Es que no pude hacerlo”
“Es que no me dijeron”
“Es que no sabía”
“Es que eso no me toca hacerlo a mi”
“Es que había mucho tráfico”
“Es que me entretuvieron”
“Es que eso no es mi culpa”

Pura “Es que zofrenia”. Para todo tenemos una “razón”. O llámala justificación, explicación, pretexto o ponle cualquier otro nombre. El caso es que siempre tenemos una explicación del por qué las cosas no funcionaron o no van a funcionar en lugar de tener resultados

¿Tú tienes en tu vida resultados o tienes explicaciones?

Mi recomendación es que actúes como si la frase “es que” estuviera prohibida y te fuera a caer un rayo si la dijeras, porque entonces te vas a poner creativo para generar soluciones y hacer que las cosas pasen. La cuestión es que es más fácil – toma menos tiempo y energía – encontrar una frase que lo explique todo que tomar acciones y crear una solución.

Y aquí van incluidas todas sus hermanas…
a) “Lo que pasa es…”
A veces cuando escucho esta frase de alguien a quien le compré un producto o servicio lo interrumpo y le digo “Espera un momento, si estás a punto de decirme porqué algo no funcionó, me vas a dar una justificación y no una solución. Y yo quiero una solución”. A muchos no les gusta, pero me da muchos resultados positivos porque saben que sólo voy a aceptar una solución.
b) “Déjame explicarte…”
Cuando se usa para explicar por qué las cosas no funcionan en lugar de usarla para que alguien entienda algo.
c) “Pero…”
También hay excepciones para ésta, PERO la mayoría de la gente la usa de formas que no les ayudan, mi recomendación sería que primero la dejes de usar completamente y después la puedes volver a incluir en tu vocabulario. Como alternativas puedes usar “y” o “al mismo tiempo”, que he encontrado que cubren prácticamente todos los casos en los que utilizamos el “pero” de forma inconveniente (que conste que dije “inconveniente” y no “incorrecta”.)

2. Posponer las cosas

Esto mejor lo explico después…



¡No era broma!

3. Puntualidad

Una gran parte del tiempo cuando no estoy dando un curso estoy tomando uno. Hace unos meses en un curso escuché al instructor decir…

“Lo que haces en pequeño LO HACES EN GRANDE”.

En mi experiencia es muy cierto. Al ver lo que haces cada día, en tus acciones comunes puedes encontrar por qué las cosas te funcionan o no te funcionan. También leí recientemente que la confianza en ti mismo depende de tu auto-imagen, y ésta depende directamente de la reputación que tienes contigo mismo. Sí, es un concepto curioso, y muy interesante. Quiere decir que yo me enseño cosas de mí mismo todo el tiempo.

Hay mucha gente que dice que la puntualidad es cuestión de respeto al tiempo de los demás, formalidad, etc. Todo eso es válido. Al mismo tiempo (para no usar “pero”) yo creo que hay un par de razones más importantes para ser puntual y a continuación te las comparto.

a) Congruencia y confiabilidad
Si dices que vas a llegar a las 5 (o lo piensas) y no lo haces, estás aprendiendo que cuando dices algo no lo vas a cumplir. ¿Qué va a pasar la próxima vez que te digas “voy a tener éxito en éste proyecto”? Una voz te va a contestar “Naaaaa, nunca lo haces”.
¿Y qué tal cuando te dices cosas como… “voy a aprender inglés, voy a iniciar mi negocio, voy a hacer ejercicio, me voy a despertar temprano, voy a arreglar X o Y”?
b) Estrategia
Alguien una vez me preguntó cómo dejar de posponer las cosas y mi respuesta fue muy sencilla: “Ve y hazlas”. Porque cada vez que repites un comportamiento tus neuronas y tu cuerpo se vuelven más hábiles en hacerlo. Si pospones, cada vez que lo haces te vuelves más hábil para hacerlo. Si llegas tarde, te vuelves más hábil para repetirlo. Si gritas, te pones nervioso, ansioso, te preocupas… ¿adivina qué pasa? Te entrenas para hacerlo mejor. Empieza hoy a romper tus propias estrategias de autosabotaje, y te recomiendo que busques ser más puntual. (Nota: si tienes alguna razón para no ser puntual hoy, vuelve a leer el punto 1).
c) Lo haces EN GRANDE
Estás llegando tarde a todo en tu vida… a las oportunidades, a los buenos negocios o empleos, a las personas adecuadas, a los lugares adecuados. Todo en tu vida va a ocurrir tarde cuando podría suceder antes. Lo malo dura más y lo bueno tarda más en llegar porque tu estrategia inconsciente es… llegar tarde.

Llegar temprano también puede ser un problema para quien te espera, pero es mucho más fácil de solucionar. Puedes esperar leyendo, escribiendo, trabajando o aprovechar el tiempo en alguna otra forma. Siempre que hay posibilidad de que tenga que esperar (en una fila, una cita, un trámite, etc.) llevo una pluma, un cuaderno y un libro para aprovechar mi tiempo.

2. Posponer las cosas

Mmm, no, mejor después.

4. Contribuir al desorden

Continuamente la gente hace cosas que no nos dejan salir adelante. Nos estorbamos unos a otros y pisoteamos los intereses de otros. Tenemos frases como “Si alguien va a llorar, que lloren en casa de otro” para justificar hacer cosas que afectan a otros con tal de no afectar nuestros propios intereses. No estoy diciendo que no protejas tus intereses, pero hacer preguntas como “¿De qué forma lo puedo hacer sin afectar a otros?” pueden llevarnos a ser creativos y encontrar formas de que las cosas sucedan sin pisotear los intereses de otros.

Siempre que vayas a hacer algo pregúntate “¿Qué pasaría si todos hiciéramos lo mismo al mismo tiempo?

La imagen que acompaña a éste artículo la tomé en un supermercado “de lujo”. Así es, aún la gente que se dice “culta, educada y de buen nivel socioeconómico” hace cosas como pegar chicles bajo la mesa o la silla, tira basura, ceniza y colillas de cigarro en la calle cuando no la ven (y a veces aunque la vean), se estaciona en doble fila, se pasa el semáforo cuando sabe que se va a quedar estorbando a media calle, o como está en la imagen y lo que resume todo lo anterior: Creas un problema y se lo dejas a alguien más para que lo resuelva. ¿Qué pasaría si todos hiciéramos lo mismo al mismo tiempo? ¿Te imaginas el desorden y el caos que generaríamos?
Por cierto, si estás pensando “es que todo el mundo lo hace” te puedo dar dos ideas: (1) Sería bueno que leyeras de nuevo el punto 1 sobre la esquezofrenia y (2) ¿qué tipo de reputación estás adquiriendo contigo mismo?

Es por eso que Steve Siebold ha estudiado por más de 25 años a la gente más exitosa, la que el llama “La clase mundial”y dice que ellos SIEMPRE SON GRANDES y no sólo cuando los ven. Ellos se comportan con clase mundial todo el tiempo porque están construyendo una reputación consigo mismos. No es cuestión de si te ven o no, es cuestión de quién te estás enseñando que eres. ¿Eres alguien que contribuye al caos o a que todo esté mejor?

Por cierto, es irrelevante si te ven o no. Las personas de Clase Mundial siempre se dan cuenta de quien eres porque saben que lo que haces en pequeño lo haces en grande. Te observan en tus pequeñas acciones y saben si eres o no alguien confiable en los grandes negocios, los grandes puestos, las grandes oportunidades.

2. Posponer las cosas

¿El 2 después del 4?
¿Te das cuenta?
Posponer no solo implica retrasar las cosas, sino que también altera el orden de las cosas, desbarata la estructura que la gente está esperando y crea muchos otros impactos negativos en tu vida, empezando por que te vuelves más hábil en hacerlo, como expliqué en el punto 3 al hablar de estrategias.

Somos muy convenencieros… posponemos el plan de negocio para un nuevo emprendimiento, pero no posponemos el cine o la tele; posponemos la ensalada y la comida saludable pero no el pastel de chocolate; posponemos el ejercicio pero no el descanso. ¿Alguna vez has pospuesto el posponer? (o en otras palabras dejar para después la idea de dejar para después). A veces creo que no es cuestión de dejar de posponer, sino de posponer las cosas adecuadas.

Un amigo me dijo una vez “Si lo puedes hacer en éste momento hazlo”. Tiene razón. Es mucho más cómodo posponer pero la cantidad de energía mental que le dedicas a largo plazo es enorme comparada con hacerlo en éste momento. No puedes olvidarte de ello porque sabes que si lo haces no va a ocurrir y entonces te estás acordando continuamente de hacerlo. O de plano te olvidas de ello y ahora si es garantía que no va a ocurrir.

Jim Rohn decía que es muy fácil tener un gran éxito en la vida. Cuando la gente le preguntaba “Y entonces Jim ¿porqué la mayoría de la gente no tiene éxito?”, el respondía: “Porque es más fácil no hacer nada”

Es cuestión de Inteligencia Emocional. Hacerlo cuando quieres hacerlo es muy fácil, todo el mundo puede hacer eso. Pero hacer lo que sabes que tienes que hacer para que algo suceda a pesar de que no quieres hacerlo en ese momento… eso implica ser congruente con tus decisiones, construir una gran reputación contigo mismo, y respetarla. Y de paso estás volviéndote más hábil (practicando estrategias) para lo que te hace avanzar y no para lo que te detiene.

Bueno, por lo menos de algo sirvió posponer el punto 2. Pude hablar de estrategias, reputación y congruencia para poder escribir ese último párrafo 😀
(y esa fue una justificación, ¿lo notaste?)

Todo esto lo podría resumir con una frase que me gusta mucho decir:
“DEJA DE NEGOCIAR CONTIGO EL FRACASO”

Conviértete en la persona que llega a tiempo, haz que las cosas sucedan, conviértete en el que no tiene explicaciones sino resultados, y contribuye continuamente a que el mundo sea un mejor lugar porque pasaste por ahí.

Recuerda: No se trata tanto de lo que sucede en tu vida, sino de qué haces con lo que sucede en tu vida.

Vive con intensidad porque¡LA VIDA ES GENIAL!

lunes, 4 de julio de 2016

365 días de felicidad, reinicia el contador.


***La vida es una celebración y todos estamos invitados***

Hace unos días recibí la terrible noticia de un familiar, que desafortunadamente, se encuentra en fase 4 de cáncer; al externar la preocupación por dicha situación a un camarada, lo único que pudo decirme fue que ante esas situaciones, te queden 2 días ó 2 años, lo único que se recomendaba era disfrutar la vida, comentario que me dejó soliloqueando.

El día de hoy, le he dado una vuelta más al sol, mañana es mi cumpleaños y lo único que me pasa por la cabeza son los triunfos, la felicidad, el aprendizaje, las fuertes decisiones y todo lo que pudiera englobar otro de los mejores años de mi vida, lo que se podría traducir como el segundo año consecutivo más feliz de mi vida hasta hoy.

Me despido de un año que nuevamente me vio crecer laboralmente, disfrutar a mi familia y amigos cercanos, ampliar mis horizontes en la CDMX y en varias partes de México; no presento ninguna queja de mis decisiones, me gusta mucho quién soy.

Probablemente podría reducir todo a un simple gracias; decidí extender el agradecimiento porque cuándo los años son malos, las quejas no se hacen esperar, sin embargo, lo positivo fue frecuente en mi vuelta al sol.

Vienen nuevos retos y nuevos proyectos, la meta es poder celebrar dentro de 365 días los retos y proyectos como una realidad, una realidad que nos lleve a seguir disfrutando la vida; junto con esas personas especiales que le dan sazón a mi existir.

La vida es una celebración, ¡Viva la vida!

y tú ¿Celebras tu vida?