Señor, no tengo manera de comunicarme con usted; me he quedado sin celular y fb no es una red en la que podríamos ser "amigos".
Así que al darme cuenta qué no quiere saber nada más de mí, tomo éste medio como la única manera para despedirte por toda la eternidad y lo basto del infinito de tu persona. Y lo hago pensando en todas las cosas positivas que pude abstraer de ti y que ahora me conforman y ayudan a ser mejor (ya no olvido cerrar correctamente el refresco), con la nostalgia y el gusto de los buenos momentos que vivimos sólo nosotros dos (la perdida espontanea de la conciencia en la que era nuestra burbuja), y el enorme enorme gusto de haberte conocido y de haber sido parte de la historia más inocente, arrebatada, emotiva y tierrna que pudo brindar el tres-cero-tres-B5, del residencial los ángeles (desde sus piedritas en la ventana hasta sus peleas con cosas arrojadas en la escalera del edificio).
Todo el amor, todas las bendiciones y todo el cariño que he podido brindarle en mi vida a alguien, se van contigo ésta noche.
Un fuerte fuerte fuerte fuerte abrazo.
[atte. La persona más falsa, hipócrita y mentirosa que conociste en tu vida]
(el nombre es protegido puesto que no soy una persona que se maneje a los niveles de la basura que cínicamente se dignó enviarme estas líneas)
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